lunes, 9 de diciembre de 2013

Nuevas especies en el comedero.


     Bueno, después de un tiempo, cuando en un comedero se repiten las mismas especies, por mucho que cambiemos posaderos o pensemos cosas nuevas....uno empieza a sentir que repite lo mismo una y otra vez, y aunque éso se ve compensado por el hecho de que uno cada vez se encuentra más agusto en el sitio y acaba sintiéndolos como de la familia, no deja de ser igual. Es verdad que cada día es distinto, que siempre se aprende algo nuevo o se capta algún detalle que se ha pasado en ocasiones anteriores, va uno aprendiendo qué falla en la iluminación, dónde y a qué potencia poner los flashes....pero cuando uno no se espera una especie nueva y la que aparece es ésta......


....el corazón se acelera de nuevo.

Una pareja, primero el macho y después la hembra, entró muy pronto, casi antes de salir el sol cuando ya clareaba el día. Su comportamiento, como buenos pitos reales, es enormemente cauteloso. No bajan hasta haber dado varias vueltas y haber oteado desde arriba el entorno y aún así no lo hacen al comedero de golpe, sino que zascandilean en los árboles cercanos. Varias curiosidades, una, que la hembra parece llevar la voz cantante, que permanecen cerca entre sí pero parecen tener una distancia mínima entre ellos a partir de la cual empiezan a verse como molestos, de ahí que bajaran al comedero alternándose sitios. Otra, que lo que venían buscando y comían era la mezcla de manteca, no las avellanas y nueces que parecen reservadas al picapinos. Y por cierto, que cuando se encontraron con el picapinos, fueron capaces de , manteniendo la distancia, comer a muy corta distancia (como he dicho, cada uno lo suyo).
Esa mañana, una maravilla, bajaron los dos picapinos (macho y hembra), los dos pitos (macho y hembra) y los coleguillas de siempre aunque cada vez más confiados (herrerillos capuchinos y comunes, carboneros, y los pinzones, cada vez más habituales).

La hembra de pito, fácilmente distinguible por su bigotera gris:






Aquí la pareja manteniendo esa distancia entre ellos que os comentaba..."que corra el aire":


El aún más bonito macho (con su bigote rojo, algo más desconfiado por cierto):










Aquí relamiéndose un momento y enseñando la larguísima lengua tan especializada que tienen los carpinteros:




Y el momento que os comentaba donde coincidieron picapinos y pito, cada uno a lo suyo:



Las visitas, siempre agradables, de los picapinos a por su ración de nuez (cascan y se comen una, entera o casi entera, y se van, se entretienen lo justo y dejan las migajas a los pequeños):

Primero la hembra (con el píleo negro, sin mancha roja):

y un poquito más tarde el macho (con esa nuca roja):


Y como os comentaba, los pinzones, cada vez más descarados (por fin!, mira que son siempre recelosos):




Los bonitos capuchinos:



El herrerillo común, que a base de verlo a menudo pierde protagonismo a pesar de su belleza:




Y les pasa lo mismo a los carboneros comunes, los macarras del comedero:




Y los rápidos trepadores, que en menos que canta un gallo ya tienen el pico lleno de semillas y pipas y parten raudos a incrustarlas en alguna grieta para tenerlas de reserva:




Y ésto es todo de momento.....no sé si volveré a tener tanta suerte como ese día, pero al día siguiente merodeaba por allí, aunque como íbamos dos supongo que receló al ver más bulto y ese día decidió no bajar.
Un abrazo colegas.

12 comentarios:

  1. que buena entrada,ese pito de lujo!!!me encanta las tomaas, a mi hoy me han entrado los trepas, entraban y se iban con el pico lleno a si unas cuantas veces
    saludos y enhorabuena

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    1. Muchas gracias Marcos. Los trepas dan mucho juego pero son tan nerviosos y rápidos que te ponen de los nervios, no hay quién les retrate en condiciones. Un saludo.

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  2. Vaya suerte tener un comedero tan concurrido y con tan bonitas especies.
    Lo de saber comentar tan amenamente las fotos no es precisamente suerte.
    Una preciosidad, o varias.
    Saludos.

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    1. Ni yo me lo esperaba, pensaba que iba a ser un sitio muy soso porque no prometía mucho, se oían cuatro piídos cuando paseabas por allí y lo poco que había estaba en las copas de los pinos, pero sí....a ver si rinde. Un saludo colega.

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  3. Jolines me llegan los dientes al suelo Andres. Pero que preciosidad de pajarillos, todos. Los pinzones los tienes geniales, mira que les cuesta subir a los posaderos.
    Te felicito compañero por tu trabajo.

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    1. El único truco es sembrar el suelo bien de semillas y cuando ya estén allí todos los días un bando majo (unos 10 ejemplares) ya empiezas a afinar: echas menos en el suelo y más en la mesa o donde sea, de todas formas siempre hay un ejemplar atrevido , en este caso es un macho no muy colorido, otros años era siempre la misma hembra, pero los demás no bajan ni a tiros. Para envidia lo tuyo de este finde, mamoncete.

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  4. Pedazo de curro y aqui se ven los resultados. Conozco pocos comederos que en tan poco tiempo den estos resultados, muy buenas fotos Andrés. Si intentas mejorar posaderos y fondos, ya si que te dejo de hablar durante un tiempo....Un saludote.

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    1. Muchas gracias Abel...yo llevo montando comedero en invierno solo cinco años y no son suficientes para decir que tienes experiencia pero algo va aprendiendo uno y este año he comprobado que más que la cantidad de especies que haya o veas alrededor, es la buena situación del comedero y que las aves entre y salgan sin recelo porque vean seguridad. Como no tengan vías de escape, posaderos previos para otear etc. malo. Yo creo que incluso el hecho de que haya árboles muy altos alrededor, de donde les puede venir un ataque sin haberlo visto, les agobia, cuando están comiendo se sienten muy vulnerables y son muy tontitos. A ver esos capuchinos colega.

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  5. Andrés. Increíble!! que se sesión. Madre que subidón te tuvo que dar. amigo!! me tiene sorprendido el fenomenal uso de los flashes. muy fino. un día ya me contarás el esquema y el planteamiento de los flashs. me tiene intrigado.

    Enhorabuena por los resultados que son fruto de la constancia y el conocimiento!!

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    1. Muchas gracias Pablete, cuando lo tenga más afinado te contaré, pero en realidad son sólo dos flashes a 45 grados del sujeto (aprox.), a ambos lados de la cámara y algo desde arriba, el de la izquierda más o menos un tercio más de potencia que el de la derecha....pero no me gusta el resultado...es demasiado fino como bien dices, da una luz difusa donde se ve alguna sombra pero está todo demasiado bien iluminado. A mí me gusta más cuando la luz del flash principal ilumina muy bien al sujeto, como el sol, y luego la de relleno es muy leve (éso imita mejor la luz natural), pero para que éso quede medio bien y no haga sombras feas el flash principal debe estar muy alto, casi cenital, porque si ves una sombra muy bien recortada por detrás del ave queda raro, si la ves abajo en el suelo parece el sol del mediodía....(bueno, o esa paja mental me hago yo). Un saludo chavalote y gracias a todos por vuestros comentarios.

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  6. Que pasada tío, como molan todas, pero ese pito real es un regalo divino que se te apareció, y con su parejita.
    Una chulada todas, saludos, Fernando.

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    1. Muchas gracias chavalote. Ya sabemos que con los bichos la mitad es trabajo y la otra mitad suerte....y ése día hubo suerte. Un saludo colega.

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